miércoles, 20 de enero de 2016

Guiso de ternera a la borgoñona

Traigo una receta de domingo dominguero, para estos días de invierno que te da pereza hacer cualquier cosa, un guiso típico de la cocina francesa, que se hace solo y con el que quedas como un rey en la cocina.


He traducido su nombre del francés al español, pero este guiso a lo mejor lo conocéis mejor si digo "bœuf bourguignon", se hace en el horno, la base y los ingredientes son super sencillos y como va al horno no tienes que preocuparte de si se pega o no en la cacerola.


Mientras se hace puedes tirarte a la bartola, leer un libro, ver una peli... porque además lo he acompañado con polenta, que se hace en un abrir y cerrar de ojos en el último momento, vamos, que es el colmo de la vagancia de plato, jejeje.


Lo puedes hacer también un día que tengas invitados, dices el nombre en francés y parece que has hecho un mundo, además es un guiso rico en sabor y color, es muy potente ya que se hace con vino y la carne se deshace.


Ternera a la borgoña:
Ingredientes
1 kg de espalda de ternera (o cualquier otro tipo de carne para guiso)
1 cebolla
2 dientes de ajo
1 zanahoria
3 lonchas gorditas de panceta
4-6 champiñones
750 ml de vino (una botella)
100 ml de agua
Tomillo
sal (muy poca)
Pimienta negra
1 cucharada de puré de tomate concentrado (si no tenéis, podéis echar un poco de tomate frito)

En una cacerola pata para el horno, doráis la carne ya partida en trozos, no echéis toda la carne a la vez, hacerlo en tandas, que sino no se va a dorar, lo que queremos es que cada trozo se dore. Retiráis a un plato cuando este dorada y seguí dorando la carne.
Cortamos todas las verduras en cachitos y la panceta.
En la misma cacerola, echamos el ajo y la cebolla, doramos y añadimos la zanahoria y la panceta, cuando esté todo dorado añadimos los champiñones, dejamos que rehogue todo un minuto y añadimos el puré de tomate, rehogamos otro poco y añadimos la carne, el tomillo, la pimienta, el vino y el agua.
Dejamos en el fuego hasta que rompa a hervir.
Mientras, precalentamos el horno a 150ºC.
Para que se cueza toda la carne por igual, hacemos un círculo del mismo tamaño que nuestra cacerola con papel de horno, como os enseño en la foto y lo ponemos en la cacerola.





Tapamos con la tapadera y lo metemos al horno durante 2 horas- 2 horas y media, depende de lo grande que sean los trozos de carne.
Si no tenéis una cacerola apta para el horno, lo podéis hacer todo en una cacerola normal, y a la hora de meter el guiso en el horno, lo echáis en una fuente apta para el horno, tapáis con papel de horno como en la foto y si no tenéis tapadera para la fuente, podéis poner papel de albal bien, bien sellado en la fuente a modo de tapadera.

Una vez que esté hecho el guiso, hacéis la polenta:
250 gr de polenta
250 ml de leche
250 ml de agua
25 gr de mantequilla
1 cucharadita de sal

En un cazo echamos la leche, el agua y la sal, cuando rompa a hervir añadimos la polenta, dejamos que todo hierva unos 5 minutos, hasta que empiece la mezcla a espesar.


 

jueves, 14 de enero de 2016

Pastelitos de judias blancas y coliflor

Ya estoy de vuelta de las navidades y me toca volver a la rutina y al frío y al  comer normal otra vez. Para empezar el año con buen pie os traigo unos pastelitos muy fáciles de hacer que no dan mucho trabajo y con ingredientes muy humildes.


Es una cena perfecta acompañados de una ensaladita o lo podéis servir como acompañamiento a la carne o al pescado. No tienen gluten, son veganos y tienen básicamente dos ingredientes, las judías blancas y la coliflor.


No hay que darlos ni forma ni nada y los podéis hacer con antelación y luego calentarlos en el horno, incluso lo podéis congelar o hacer más grande y comerlos como una hamburguesa, vamos, que tenéis mil opciones ;)


Una forma diferente de comer judías y coliflor, los niños se lo comen sin rechistar y los mayores también!

Pastelitos de judías blancas y coliflor:
Ingredientes:
400 gr de coliflor
1 lata de judías blancas cocidas (400 gr y ya escurridas 255) Las podéis cocer vosotros también
1/2 cucharadita de levadura en polvo (tipo royal)
Pimienta negra al gusto
Media cucharadita de sal
Pizca de nuez moscada
Pizca de jengibre en polvo
50 gr de harina de garbanzos (podéis utilizar harina normal, aunque os recomiendo que probéis la harina de garbanzos)

Ponemos en un cazo agua a hervir, mientras cortamos y lavamos la coliflor. Cuando empiece el agua a hervir, echamos la coliflor y dejamos que cueza unos 10 minutos. Escurrimos y reservamos.

En el robot de cocina ( si no tenéis, podéis utilizar la batidora) echamos las judías blancas y todas las especias y trituramos hasta que se quede todo muy cremoso, echamos la coliflor y trituramos un poco. Sacamos del robot, echamos en un bol y añadimos la harina de garbanzos, mezclamos bien y dejamos reposar la mezcla unos diez minutos.
Ponemos una sartén  al fuego con un poco de aceite y con ayuda de una cuchara vamos echando la mezcla, cuando estén dorados por un lado, les damos la vuelta y cuando estén doraditos los sacamos y listo!